El fórum sobre las moscas artificiales abrió el debate sobre los efectos medioambientales que la polémica infraestructura de Red Eléctrica de España puede provocar al hábitat del Curueño y a los animales
El pasado jueves, día 9 de diciembre, dentro del Forum de plumas de gallo y moscas
artificiales para la pesca que se celebró en las instalaciones municipales del Albergue del
Peregrino de León, con motivo del curso de titulación de monitores impartido por la
Federación Española de Pesca y Casting, tuvo lugar una interesante conferencia sobre la
cría de los gallos del Curueño, impartida por el criador de La Vecilla, Joaquín Diez
González, que hizo un recorrido por la historia y peculiaridades de estas aves, calificando
como principales factores de riesgo para su subsistencia la despoblación de la comarca, el
retroceso de la pesca deportiva, la gripe aviar y la alteración del entorno que padece el
valle del Curueño. En este último aspecto, manifestó su preocupación por los efectos que
la línea de alta tensión Sama-Velilla, de mantenerse el trazado por esta zona, podría
tener sobre los gallos y l a calidad de sus plumas, vinculada a las características de su
hábitat. Todo esto, teniendo en cuenta lo delicados que son y lo mucho que les afecta las
condiciones externas y medioambientales.
Una pérdida irreparable
Las plumas de los gallos del valle del Curueño no tienen parangón y sus peculiares tonos,
finura, brillo y transparencia, las hacen únicas en el mundo, estando consideradas como
las mejores del mundo para la confección de las moscas ahogadas clásicas, aunque
también son muy apreciadas para la confección de moscas secas, ninfas y otros tipos de
señuelos modernos. Su crianza se centra principalmente en dos razas bien diferenciadas,
los gallos Pardos (con el plumaje moteado) y los gallos Indios (de plumaje totalmente
liso), contando con diversas variedades que atienden a sus coloraciones y entre las que
destacan los gallos denominados corzunos (con plumas de aspecto similar al de la piel
del corzo), los sarriosos (cuyo plumaje se parece a la piel del sarrio o rebeco), los flor
de escoba (cuando sus plumas presentan una tonalidad de colorido similar al de las
escobas de monte en la época de floración), los langareto (cuyas plumas ofrecen un
moteado alargado y en bandas), los negriscos (con plumas de color negro brillante), los
acerados (con plumaje semejante al color del acero bruñido), los rubiones (de plumas
rojizas), los palometas (con plumas blanquecinas) y los plateados (de plumas
cristalinas).
Cuando se piensa en la importancia de estos gallos y las cualidades de sus plumas,
ensalzadas ya el siglo XVII, en el El Manuscrito de Astorga, y que dan fama a León a
nivel internacional, la problemática que plantea decisiones como la referente al trazado
de la línea de alta tensión Sama -Velilla, invitan a la siguiente reflexión: Si pese a la gran
oposición ciudadana exístete (basta con entrar en Internet y navegar un poco por el
tema) se mantiene el trazado proyectado por esta zona y sus efectos, como auguran
muchos, llevan a la desaparición de esta raza de gallo única en el mundo, ¿quién seria
capaz de asumir la responsabilidad, o que medidas compensatorias de las ofrecidas,
podrían llegar a compensar esta perdida para León?. Sinceramente, nadie y ninguna.